En estos días tan extraños, eres mi razón. Sin ti, no la habría, porque nada de lo que está pasando es explicable. Nada tiene sentido alguno y me siento descolocada, sin argumentos, sin salida. Sólo tú…
Eres mi locura, mi pasión, mi deshonra, mi amor, mi ruina, mi todo. Todo es por ti, todo empieza y termina en ti. Brillas transparente y cegador, lleno de vida. Me miras con tus ojos de niño y veo el confín de mis pensamientos, Estás, existes, ERES. Un tiempo continuo que no para, que me llena, me provoca, me confunde, me liquida, me involucra. ERES.
Tenemos tan poco en común a veces, pero me pierdo en tus laberintos y quiero perderme. Reinvento nuevamente la que soy sólo para fastidiarte y alegrarte, para no perder el ejercicio y finalmente porque puedo. Me enseñas, diariamente. Me conmueves sin medida ni advertencia. Lloro y río. Te odio y te amo, en un carrusel interminable del que no me quiero bajar.
Te respiro por última vez este día y me doy fuerzas para ser la que no quiero, para vivir lo que no puedo y aceptar lo improcedente y para seguir amándote, a diario, con fuerza, con decisión, sabiduría y niñerías. Todos los días. Shinning on your crazy diamonds. Es todo lo que soy.
Como cosa inusual por completo, soy la primera. Y además llueve. Así es que tiene que ser.
Mira a dónde es que he venido a dar. Suena el sintetizador mientras espero la entrada de David. David…. tan hermoso como el otro David. Pero mejor, ya que le arranca el alma a los dioses con sus dedos pulsando unas cuerdas en lugar de una miserable honda.
En general no lloro en los blogs de mis amigos. Debe ser la hora o…. no sé, el día del mes… o algo. Si empiezo no termino esta noche ni sé ni cuándo, así que mejor no empiezo. No te pareces a ti en esta entrada. Creo que te pareces a mí. O quién sabe, Cerecita…. Un beso lluvioso.
(Gracias por traerme de vuelta la canción, después de tantos años.)
Querida M: tan atrás en la historia de este blog que te has ido. Esa entrada la escribí hace tantos años atrás, en los albores de esta bitácora, pero te agradezco el esfuerzo de haberlo leído y la amable comparación.
Un abrazote y your welcome 🙂